porque te gusta mi boca
te gusta mirarla
y a mi me gustaría sentir a la tuya a su lado (sobre ella)
de la nada dices que te gustan mis pies
su pequeña y extraña forma, su línea de bronceado
y el banboleo de mis pasos en el aire
te miro y te pregunto si quieres jugar
me miras y me preguntas como jugar sin respuestas
te pregunto qué quieres saber sin palabras
tengo el corazón abierto para querer (te)
tengo los oídos listos para el silencio
tengo la boca llena de besos para tu frente
el corazón tiembla de miedo
el orgullo se alista a darte paso
y están estas ganas de quererte
nuevas, locas y tímidas
hoy he reencontrado todas las sangres que corren por mis venas
tengo el corazón mestizo
tengo fe en el corazón
vivo en un país demasiado variado para algunos
vivo en mi país
te quiero a ti, con todos tus colores
y soy una chola blanca, zamba serrana, que vive en la selva de cemento
déjame quererte como eres y como soy
1 comentario:
Me ha gustado mucho la personificación claroscura de las ganas de querer: "nuevas, locas y tímidas". Pero lo que de verdad me ha sorprendido, y gratamente, ha sido que el poema trascienda la declaración amorosa y tiente una reivindicación del sujeto mestizo. Los afectos solo resultan auténticos si comienzan por uno mismo. Al abrazar su propio mestizaje, la voz poética abraza también al país. Un poema tan necesario en esta época electoral.
Espero que sigas así, Paloma, realmente da gusto darse una vuelta por tu blog. Saludos.
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